martes, 11 de octubre de 2011

Día 25: Washington


11 de octubre de 2.011


Hoy hemos vuelto a Washington. El día que estuvimos aquí hace 2 años, nos llovió a mares y dejamos mucho por ver. Hoy el tiempo ha estado de nuestra parte.


Nada más llegar, nos hemos equivocado y nos hemos metido en el parking privado del pentágono. La mirada asesina de un policía y la vigilancia de una agente federal de paisana, han echo que salgamos de allí pitando.







Desde cerca, no se le nota la forma de pentágono, claro.



La siguiente parada ha sido el Capitolio.



Lo mejor de Washington, es que la entrada a sitios oficiales, museos y demás lugares de interés, es completamente gratuita.






Nos han echo una visita guiada por el Capitolio. 








Esta fue la primera cámara del congreso.
















La biblioteca del Congreso.










Hemos estado en el museo del espacio y la aviación. Tienen expuestas piezas originales muy interesantes. 



Todos los aviones son de verdad.





Este es el auténtico módulo del Columbia donde iba Neil Amstromg y los otros dos astronautas en el viaje en el que el hombre pisaría la luna.




Esta es la sonda Viking que ha estado en la órbita de Marte.




El cohete de Tintín.





Telescopio espacial.



Vehículo lunar usado en la misión a la luna.






Uno de los primeros aviones.












Réplica del primer globo aerostático.











En fin, tienen de todo. La visita a este museo ha sido más interesante que la visita al centro espacial Kennedy.




El Teatro Ford´s, donde hace 146 años, asesinaron a Abraham Lincon de un disparo en la cabeza. Se puede visitar, y también es gratis.







La casa en la que murió Lincon, está justo frente al teatro. Sacaron a Lincon herido del teatro, y le llevaron a esta casa, donde le atendió un médico. Entró en coma y murió a las 10 horas.



Palco en el que se encontraba Lincon en el momento del disparo.



Un actor y simpatizante de los confederados, se le acercó por detrás, disparó, y escapó saltando al escenario. Se rompió una pierna al caer. Aún así logró levantarse y llegar a su caballo. Días después, fue localizado, y al negarse a rendirse, fue abatido a tiros resultando muerto.



La pistola también la tienen expuesta en el teatro.



Asientos donde estaba Lincon y su esposa.







Pasamos a la casa donde murió Lincon. Esta es la habitación donde la mujer de Lincon esperaba noticias.







Y esta es la cama donde murió Lincon.






Bueno, fue una visita muy emocionante. No sabíamos al venir a Washington, que todo esto se conservara, y que encima se pudiese visitar. Además gratis.



Los indignados de Washington.



De nuevo en la Casablanca.







Manifestación contra la guerra.



La parte delantera de la Casablanca. La otra vez que estuvimos aquí no fuimos capaces de encontrarla.






Creo que esta mujer es gallega, y lleva reivindicando cosas frente a la Casablanca más de 25 años.




Los asientos de los vagones del metro de Washington son estilo butaca.





Anochece en Washington. Por cierto, que el lago que hay entre el monumento a lincon y el de Washington, se lo han cepillado; lo han vaciado de agua y han levantado la tierra. No sé lo que irán a hacer ahí.



Después de Washington, partimos a Baltimore. Hoy el viaje ha sido corto: 60 kilómetros.

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